Claudia Maturana Bobadilla:

Doctora en Ciencias con mención en Ecología y Biología Evolutiva.

“La Antártica es un paisaje que ha puesto a prueba todas mis capacidades y dimensiones. Sin duda, es un lugar que te lleva desde la frustración máxima de no lograr tus objetivos, principalmente por las condiciones climáticas, hasta la mágica sensación de sentirte conectada con cada componente del paisaje. Es una relación recíproca donde crees explorar la Antártica, pero en el fondo la Antártica te descubre a ti”.

CLAUDIA MATURANA BOBADILLA

Claudia Maturana Bobadilla es licenciada en Ciencias con mención en Biología (2007) con un Magíster en Ciencias Biológicas con mención en Ecología y Biología Evolutiva (2011), Doctora (PhD) en Ciencias con mención en Ecología y Biología Evolutiva (2020), de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Chile.

Los hielos del Polo Sur esconden información milenaria sobre nuestro planeta. Año a año la Antártica congrega a numerosas científicas para entender la huella evolutiva de los hábitats que existen en esa geografía, muchos de los cuales están desapareciendo producto del cambio climático.

Bajo esa lógica la científica chilena Claudia Maturana Bobadilla ha desarrollado su trabajo buscando entender los organismos que viven en aguas continentales en altas latitudes a través del estudio de copépodos del género Boeckella, crustáceos diminutos que habitan en las regiones Subantárticas y en la Antártica.

Estos invertebrados tienen una historia evolutiva muy antigua, influenciada por la separación de los continentes y los eventos climáticos, características que vuelven relevante su conservación y estudio frente al calentamiento global.

Investigar en la Antártica ha puesto a prueba todas sus capacidades, pero también la ha conectado con los componentes de un paisaje azotado por un clima extremo.

Esa relación de reconocimiento con el entorno posee registros biográficos que aparecen a cada momento de su vida.

Este vínculo con el entorno se expresa en sus 17 publicaciones ISI que dan cuenta de su trayectoria científica, así como de su desarrollo personal.

“El premio significó un empuje importante para mi carrera, pero también para decir que estamos haciendo las cosas bien. Visualizar no sólo la producción científica, sino también la exploración de los conceptos de hacer cambios en la ciencia, como la posición de la mujer en el territorio, o romper paradigmas de lo que ya se conocía”.